Christmas Blessings for 2025
Merry Christmas, everyone. As we celebrate the joyful birth of Christ, I want to share a message of hope on behalf of all of us in the Augustinian Province of Our Mother of Good Counsel.
At the very heart of the Christmas miracle is a young woman’s courageous “yes.” Mary’s trusting and generous response to God opened the door to the Incarnation.
St. Augustine loved this mystery, reminding us that Mary conceived Christ in her heart through faith before she ever carried Him in her womb. Her example invites all of us to listen for God’s call in our own lives and to answer with the same openness.
We’ve seen that spirit of faithful response in a remarkable way this year with the election of our brother, Pope Leo XIV. His willingness to accept the call to serve the Church as its shepherd reflects that same “yes” to God’s invitation, a humble readiness to step forward for the good of others. His leadership is already a sign of encouragement for the entire Augustinian family.
My prayer for you this Christmas is that Mary’s example will inspire your own heart, helping you trust God’s presence, respond generously to His call, and carry Christ’s light into your families, communities, and daily life.
Thank you for the many ways you support our friars, our ministries, and our mission. Your faith and friendship strengthen us throughout the year.
From all of us Augustinians, may the Lord bless you with peace and joy this Christmas, and may the New Year be filled with God’s grace.
Christmas Blessings.
Feliz Navidad a todos. Al celebrar el gozoso nacimiento de Cristo, quiero compartir un mensaje de esperanza en nombre de todos nosotros en la Provincia Agustiniana de Nuestra Madre del Buen Consejo.
En el corazón mismo del misterio de la Navidad está el valiente “sí” de una joven. La respuesta confiada y generosa de María abrió la puerta a la Encarnación.
A San Agustín le encantaba este misterio; nos recordaba que María concibió a Cristo en su corazón por la fe antes de llevarlo en su vientre. Su ejemplo nos invita a todos a escuchar la llamada de Dios en nuestras propias vidas y a responder con la misma apertura.
Hemos visto ese espíritu de respuesta fiel de una manera extraordinaria este año con la elección de nuestro hermano, el Papa León XIV. Su disposición para aceptar el llamado a servir a la Iglesia como su pastor refleja ese mismo “sí” a la invitación de Dios, una humildad dispuesta a ponerse al servicio del bien de los demás. Su liderazgo ya es un signo de ánimo para toda la familia agustiniana.
Mi oración por ustedes en esta Navidad es que el ejemplo de María inspire también sus corazones, ayudándoles a confiar en la presencia de Dios, a responder generosamente a su llamado y a llevar la luz de Cristo a sus familias, comunidades y a la vida cotidiana.
Gracias por todas las maneras en que apoyan a nuestros frailes, nuestros ministerios y nuestra misión. Su fe y su amistad nos fortalecen durante todo el año.
De parte de todos nosotros, los Agustinos, que el Señor los bendiga con paz y alegría en esta Navidad, y que el Año Nuevo esté lleno de la gracia de Dios.
Bendiciones de Navidad.
